Me he vuelto adicto a esta canción...
Creo que la letra se expresa mejor que cualquier cosa que pudiera decir.
2055 - Nach Scratch (con Lesk y Madnass)
Dos... Cero... Cinco... Cinco...
Siento mi mundo llorar, no quiere explotar,
se acerca el final de los días.
Alma destructora, es la hora,
2055, el planeta se evapora.
Siento mi mundo llorar, no quiere explotar,
se acerca el final de los días.
El tiempo nos come, nos rompe,
2055, nuestra tierra en hecatombe.
Mi pensamiento se dispara cual bala que viaja ardiendo
hacia otro tiempo, futuro incierto
(¡lo estaís viendo!).
50 años más allá y dónde va la humanidad
a punto de estallar, queremos curas de humildad.
2055: expolios, monopolios,petróleo, territorios partidos
(¡culpad al odio!),
laboratorios donde se clonan soldados,
manicomios colapsados, epidemias y microbios,
tribunales virtuales que sentencian sin clemencia
contra toda resistencia al poder establecido,
satélites vigilan desde el cielo como águilas,
son máquinas qué saben en que mierda andais metidos.
Mantente en vilo, no escaparás a sus garras.
Ponen chips en nuestras nucas como códigos de barras.
Mendigos se liquidan por insecticida, ¡clamad!,
unos mueren sin comida y otros por obesidad.
Ciudad sin identidad mata por una moneda
y tras el toque de queda solo espera la humadera ya.
Nueva era, regenera tu organismo,
cirugía y energía al servicio de los mismos.
Cataclismos, maremotos, continentes rotos por seísmos,
tras diez cumbres en Kioto y no hay acuerdo,
el mundo ha muerto porque se extinguen las especies y los bosques son desiertos.
Psicosis en Metrópolis, ¡tú también caerás!
El agua es cara, en cada cara hay una máscara de gas.
Informática, robótica, razón artificial,
Desde mi bola de cristalveo este nuevo orden mundial
y observo como este rey mono en un trono impone,
el ciclo natural se rompe y se descompone.
Glaciaciones que amenazan con cubrir la tierra.
2055: año de miseria y guerra.
Soy un ladrón, le robé la máquina a Michael J. Fox
y bajé con máscara porque el aire me sabe a aerosol.
Bopal recuerda su atmósfera fría, me calenté con un vaso con 96º de alcohol.
Juguemos de hobby al Risk.
La moda es la revolución de un país,
o se nace con balón o con "UZI".
Disparo a la crisis, insistir lógico y no gusta,
buscan mi eliminación como si fuera chusta.
Escupo mermelada sintetizada,
2055, aquí se considera un manjar.
Del deporte, ni hablar:
Indurain subiría sin respirar veinte veces la Marmolada.
Ya no se hace falta solarium, quema un día nublado,
este calor odia el termómetro en su intermedio.
La religión está lejos de extinguirse;
dime, ¿qué vas a hacer si te regalan fe en un huevo kinder?
Para los niños un algodón de azúcar frito con ketamina,
vienen con imaginaciónen en sus vitrinas.
La economía solo es degustada como caviar
en dosis pequeñas, nunca elevada, para variar.
Se mezclan ideas con fantasías, un entrenamiento
al Warhammer para los hijos del enfrentamiento.
Aquí se lleva la política "aderezá" con Islam
(van a hacer estallar Long Island),
(el cielo bajo un imán).
Luce el sol negro, el desierto de Gobi
hace frontera con mi cuaderno y la tapa del boli.
Se abre y deja escapar la tinta hasta el mar,
que se adhiere a un submarino de la tercera guerra mundial.
Flota con rabia la furia, el bulling del colegio parece normal
y aparece El Sahara en vez del sentimiento, la tierra pasa del verde al ocre,
se llega al tope, salen zombies de los graffities del Cope.
2055: es el caos infinito, reina el delito,
suenan sirenas, disparos y gritos.
Evito en lo posible el exterior, las condiciones son extremas,
el oxígeno envenena y el sol quema.
Sistemas informáticos programan cada vida,
nuevos virus triplican las víctimas del sida.
(Miedo a atentados suicidas)
(nadie sale de su hogar),
Atocha y Manhattan dieron paso al Vaticano y Trafalgar Square.
El mar cubrió países enteros debido al deshielo,
más de mil especies animales se extinguieron.
Sesenta grados de día, de noche treinta bajo cero,
hace tiempo que es ácido el sabor del llanto del cielo.
Temblores de suelo desolan regiones cada hora,
un tsunami por semana el litoral devora,
el Átlantico llega ahora hasta Arizona
y en lugar de flora hay dunas a lo largo del cauce del Amazonas.
Ya no hay zonas libres de la contaminación,
ni tan siquiera las cumbres del Himalaya,
París hoy es un campo de batalla,
el crudo cubre cada playa,
no queda ningún volcán que no haya entrado en erupción.
En la población se ven malformaciones físicas,
la causa: escapes en centrales nucleales térmicas.
El polo opuesto: fábricas de bebés,
perfección bajo elección con una previa manipulación genética.
La comida es sintética,
el consumo de agua es limitado,
la atención médica es privilegio privado,
el delito es castigado con la pena capital,
uno decada tres adultos sufre Alzheimer gracias al cristal.
Es el final de nuestros días de agonía,
ya nadie confía en encontrar salidas a esta crisis.
Los oasis de esperanza son sólo pura utopía.
¡Sed bienvenidos al principio del Apocalipsis!
Siento mi mundo llorar, no quiere explotar,
se acerca el final de los días.
Alma destructora, es la hora,
2055, el planeta se evapora.
Siento mi mundo llorar, no quiere explotar,
se acerca el final de los días.
El tiempo nos come, nos rompe,
2055, nuestra tierra en hecatombe.
Podéis escucharlo vía Youtube
Autumn Castle
viernes, 23 de enero de 2009
Un himno para el Apocalipsis
De la Pluma de La Maladie de la Raison en 12:01
Etiquetas: Canciones, Estupidez humana, Social
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